jueves, 27 de septiembre de 2012

El muro

¡No tengo ganas de hacer nada!, tengo ganas de hacer todo, pero en la eteriedad del pensamiento voy argumentando lo contrario. Y quedo sordo y escucho el tráfico traspasar mis oídos, mi vista queda ciega y veo el brillo y la fantasía de mi sociedad, pierdo el gusto y embriago de sabores mutantes mi paladar, me saco la piel y veo sus vergüenzas en mi, en sus miradas. Respiro, pero quizá no es aire lo que inhalo, luego pienso, pero el pensamiento no forma parte de una industrializada mente, de una sociedad.
No tengo ganas de hacer nada, tengo ganas de hacer todo, pero hay muros de concreto.
Y aunque sé, que el muro es grande y el concreto también es frágil, cuesta trabajo salir de la cadena de producción.
El miedo nos corroe y nos obsequia ilusiones.




domingo, 23 de septiembre de 2012

viernes, 14 de septiembre de 2012

Opio

No era la primera vez que probaba opio para conseguir estados alterados de la mente. No, la verdad no era primera vez.
Pero lo que si lo volvió diferente este evento fue que esta vez, en este estado alterado de la mente  mi cuerpo mostró una conexión (por darle un nombre a esta sensación algo difícil de explicar) algo particular, esto ya que aparecieron imágenes algo amorfas, algo rítmicas, que envolvían el ambiente en una especie de ciclos sucesivos de creación y destrucción, de palabras y verbos, de carne y espíritus, de demonios y dioses, y el suelo se hizo atmósfera, y el cielo universo...

Aún no podría determinar si en medio, o en algún rincón, lograba ver destellos que pasaban rectos y fugaces, algunos a su paso dejaban condensada su trayectoria en algo similar a una cola de cometa, otros simplemente pasaban  sin dejar su recuerdo en el espacio inexistente, otros con lentitud abismante dejaban apreciar su textura eternamente. El medio -espacio quizá- en el que me encontraba, exceptuando por las partícula descritas, era completamente negro.

Poco a poco comenzaba a escuchar una especie de sucesión de voces, hablada en muchos idiomas a la vez, algunos me parecían conocidos, otros nunca los escuché ni creo podré llegar a escuchar nuevamente. Estas voces reverberaban a un compás y frecuencia algo similar a los mantras tántricos (que alguna ve tuve la oportunidad de conocer y practicar, de la rama del kundalini más específicamente ). Luego percibí que esta voz dirige parte de esta frecuencia hacia mi etérea forma, he aquí el recuerdo (llamemos recuerdo aquella imagen del pasado que se graba en la memoria frente a algún suceso acaecido) que llevo dando vuelta en mi mente...

Lo que esta frecuencia hablante decía fue lo siguiente:

"Has existido por menos de un instante, en mi pensamiento (en el de tu dios), has sido un pensamiento fugaz y de libre albedrío.. .que intentó ser más que un sueño o un deja vu, sino que intentó ser un pensamiento que se hace realidad y concibe ser un recuerdo de este dios."

Al terminar sus palabras comenzaron una serie de flashbacks, algunos eran nítidos recuerdos, otro simplemente no los reconocía. Luego el ambiente nebular comenzó a cambiar, a dispersar las formas rítmicas y sonidos etéreos, comenzaron a transformarse en imágenes conocidas... Era mi pieza, y yo comenzaba a salir del trance del opio solar.

Estas palabras continúan haciendo eco en mi mente y en mis sueños ahora en estos últimos días. No sé que hacer ni pensar, más sentarme e intentar comprender si alguno de estos acontecimientos fueron en realidad, o si sólo fueron producto de mi imaginación.. . y si fuese así ¿qué podría evitar que alguna de esas fantasiosas imágenes y palabras sean en realidad falsas o tan ciertas que sean tan fáciles de desentender?.. .

domingo, 2 de septiembre de 2012

Palabras

Es cierto.. .no me convencen para nada tus palabras, no porque no tengan un sentido lógico en su estructura gramatical, ni en su forma teatral, no, nada de eso sería el real motivo de mi convencimiento. Si debo decir que ninguna de estas se condicen con los actos, veámoslo de esta manera, un artista no es artista con solo decirlo, ni menos aún por el solo y mero echo de que maneje teóricamente los aspectos del arte, la historia de este, etc, no esto no bastaría para decir que sus palabras logran su realidad.. . el ser artista. El artista es quien logra la creación de una obra, digamos es quien materializó de alguna manera lo que había en su mente, en su ser y que al lograr la frecuencia con sus emociones pudo plasmarlas en la realidad. Es así como tus palabras debiesen condecirse con la realidad que quieren lograr, no con lo efímero que estas pueden llegar a transformarse si no se comunican en una real intensión con los actos.